Con gran labor de pitcheo por parte del novato Héctor Sepúlveda, los Pericos de Puebla, se llevaron la serie ante los Tigres de Quintana Roo, tras ganar el segundo de la serie 12 carreras a 2
Published
Foto: Pericos
Héctor Sepúlveda consiguió su primer triunfo con la franela de los Pericos de Puebla y en la LMB al tirar poco más de cinco entradas para derrotar a los Tigres de Quintana Roo por pizarra de 12-2 en el segundo juego de la serie.
Pericos atracó el pitcheo de Raúl Carrillo en la primera tanda; el panorama se nubló para Carrillo, después de que el primer y segundo bat se embazaron por medio de un error y pasaporte, respectivamente. Esto colocó el escenario ideal, para que Danny Ortiz impulsara la carrera de la quiniela con sencillo al central, posteriormente aparecieron Alejandro Mejía y Peter O’Brien, también con imparables productores para aumentar la ventaja. Cerró el rally Antonio Lamas con elevado de sacrificio.
Tigres se metió al juego hasta la quinta entrada; Con dos tercios fuera y, par de corredores en los senderos, Manuel Orduño pegó de hit al central para mandar al plato a Lázaro Hernández, esto marcó la única carrera que permitió Héctor Sepúlveda en el encuentro.
En la parte baja del quinto rollo, Danny Ortiz llegó a 35 cuadrangulares y a 100 carreras producidas, con batazo por todo el prado central, ante el pitcheo de Raúl Carrillo. Más adelante en esa misma tanda, Armando Aguilar impulsó carrera con hit al derecho y Miguel Guzmán con rodado dentro del cuadro.
Alejandro Mejía sentenció el juego en el sexto rollo, al pegar doble con la casa llena, para impulsar dos y Peter O’Brien colaboró con elevado de sacrificio, mientras que, Antonio Lamas colocó cifras definitivas del juego al disparar hit con la casa llena para mandar otras dos anotaciones más al plato.
El triunfo se lo llevó Héctor Sepúlveda pues tiró cinco entradas y un tercio, aceptó tres hits y una carrera, no dio pasaportes y ponchó a seis enemigos. La derrota fue para Raúl Carrillo. El duelo para el tercero de la serie será entre Gabriel Ynoa y Marco Carrillo.